Al pasar por la pandemia por COVID19, es difícil pensar que las bendiciones llegarán abundantemente a nuestras vidas. Bueno. La verdad no es difícil. Lo que hace difícil esto es que el enfoque no esté en donde debe estar.
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Mira, si el enfoque está en las circunstancias. Si el enfoque está en la situación. Si el enfoque está en los desafíos. Entonces la conclusión será que no podremos lograrlo.
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Ahora. Si el enfoque está en El Proveedor. Si el enfoque está en El Dueño de todo. Si el enfoque está en la voluntad de Dios para mi vida. Es diferente lo que pensamos y lo que sentimos.
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Cristo dijo: «El ladrón no viene sino para hurtar y matar y destruir; yo he venido para que tengan vida, y para que la tengan en abundancia.» Juan 10:10
Así que primero para recibir todo lo que Dios tiene para nosotros como vida eterna y para disfrutar de su gloria permanentemente, procede al arrepentimiento y acepta a Cristo como único y suficiente salvador.
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La Biblia afirma: «diciendo: De cierto te bendeciré con abundancia y te multiplicaré grandemente.» Hebreos 6:14 Y «y dijo: Por mí mismo he jurado, dice Jehová, que por cuanto has hecho esto, y no me has rehusado tu hijo, tu único hijo; de cierto te bendeciré, y multiplicaré Génesis 22:16-17
En contexto, el primer pasaje hace referencia al segundo pasaje. Es una promesa hecha a Abraham y a toda su descendencia. Según Hebreos 6, somos beneficiarios de esta promesa. Cristo con su sacrificio y victoria creó un nuevo pacto en el que toda la humanidad que cree en Cristo hace parte de un solo pueblo.
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Y este pueblo es el pueblo de Dios, los descendientes de Abraham. Así que si no somos descendientes por la familia de carne de Abraham, sí somos descendientes por la adopción que nos hizo Dios debido a la obra de Cristo.
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Qué bendición!! Que yo sea acreedor de todo lo que Dios quiera darme!! Así que puedo estar seguro que esto es para mí y para todos los que depositan su fe en Dios: «Las cuerdas me cayeron en lugares deleitosos, Y es hermosa la heredad que me ha tocado.» Salmos 16:6
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Enfócate en Dios y con fe verás Su gloria en tu vida!
