El perdón es tan importante, que fue gracias al perdón que tenemos acceso a Dios.
A través de un arrepentimiento genuino pidiendo perdón a Dios y depositando fe en Jesucristo accedemos a la familia de Dios.
Muchas personas batallan en perdonar.
Algunas personas creen que perdonar es algo que se debe sentir. Y al igual que la felicidad es un tema de decisión, perdonar es una decisión.
«Jesús le dijo: —No te digo hasta siete, sino aun hasta setenta veces siete.» Mateo 18:22 al referirse cuántas veces perdonar a una persona.
La falta de perdón trae tantos males a las personas….
Conocí a una persona que amé profundamente. Y por su falta de perdón se perdió de tantas bendiciones que Dios tenía para ella. Fue su falta de perdón que terminó aislándola socialmente. Fue su falta de perdón, por sus decisiones que al partir de este mundo, estuvo sola sin que nadie pudiera socorrerla.
Y es triste cuando vemos que Dios dice: «El ladrón no viene sino para hurtar y matar y destruir; yo he venido para que tengan vida, y para que la tengan en abundancia.» Juan 10:10
No permitas que la falta de perdón llegue a tu vida. Libérate. Pídele ayuda a Dios. Aunque el perdón es una decisión, si batallamos y es difícil, podemos pedir a Dios ayuda y el nos ayuda.
«Y si alguno de vosotros tiene falta de sabiduría, pídala a Dios, el cual da a todos abundantemente y sin reproche, y le será dada. Pero pida con fe, no dudando nada; porque el que duda es semejante a la onda del mar, que es arrastrada por el viento y echada de una parte a otra.» Santiago 1:5-6
El perdón es una decisión, no un sentimiento.